lunes, 4 de octubre de 2021

De Jennifer Foster para Mí


Sinónimo de fortaleza, templanza y sabiduría, modelo de virtudes, espíritu supra elevado, madre bendita de una prole que no sólo tiene pies y brazos, sino que raíces y ramas como dignos testimonios de tu amor por la tierra y por la vida que en ella habita. Sembradora de árboles. Sembradora de valores. Sembradora de semillas de amor y conocimientos, de frutos y sabores, de aromas y texturas. Eres el cacao de nuestro chocolate y el almidón de nuestro pan de yuca. Hueles al dulce melao de papelón con sarrapia y a veces picas como el chirelito y la pimienta, necesarios para equilibrar los amargos de nuestro paladar. Un vaivén de labores se juntan en tu quehacer cotidiano, que arduamente ejerces sin cansancio aunque extenuada, en el eterno caos de tu orden sin ley, buscando siempre las llaves para abrir las puertas de tu refugio, ese que conviertes en la guarida de nosotros todos tus hijos y pupilos. Karibe, Konuko, trueke y kayapa son de tu lengua provenir. Tapara, chorote y onoto no se te olvidan jamás. El bálsamo de tus guarapos tibios nos reconfortan el alma, mientras el paso del tiempo lo miramos de un inexacto reloj solar que nos señala lo infinito del cronos. Eres una doctora de los números, de los métodos, de las estadísticas, de los coeficientes y cotangentes, pero más bien eres tan gente que mesuras la vida entera en una pequeña pero justa balanza, formulando los elixires del amor verdadero, en la conjunción y convergencia de tus hemisferios mentales, que evolucionan cada día en una mujer con inteligencia excepcional, arraigada en lo profundo de la episteme del universo. Desde la academia a lo popular. Desde lo científico a lo espiritual. Desde lo cuantioso matemático a lo incalculable etéreo y hasta el infinito y más allá. Artes todas brotan de tus carrasposas por luchadoras y creativas por artífices manos, que teclean en la pc con la celeridad de quien escribe hasta sin mirar. Gracias bella Laura doble eme y una o. Has cultivado en mi las cosas más hermosas de ti, empezando por el amor. Has sido mi mamá, hermana, amiga, compañera compinche, socia y hasta despertador mañanero y aún nos quedan tantos caminos y montañas por escalar, tantas madrugadas de frijoles en la cocina y tantas andanzas y aventuras por contar, que me parece micro- mini- chiqui- nano diminuto este texto en el que intento describir a una increíble mujer, con corazón de uranio, tan pero tan valiosa que parecen escuetas y vagas mis palabras, porque aún no le he contado al mundo ni siquiera de las melodías de tu son, del ritmo que te recorre, como toda una negra con mucho tumbao, que no mira ni pa' los laos cuando de música se llena tu nombre! Con mucho cariño ❤ y agradecimiento ✨ Jennifer Foster. (09/2021).




Firmamento tapareado

 La Luna y Jupiter, meciéndose entre la fronda del taparo